jueves, 5 de septiembre de 2013

Senado argentino dio media sanción a la reapertura del canje de deuda

El Senado argentino aprobó el miércoles y giró a Diputados el proyecto de ley para la reapertura del canje de deuda para un 7% de tenedores que rechazaron anteriores reestructuraciones, entre ellos los fondos especulativos que litigan contra el país en Estados Unidos.

Tras ocho horas de debate la iniciativa obtuvo 57 votos a favor (del oficialismo y la Unión Cívica Radical, segunda fuerza parlamentaria), 8 en contra y una abstención.
"Los términos y condiciones que se ofrezcan en este canje no podrán ser mejores que los ofrecidos a los acreedores en la reestructuración de deuda de 2010", señala la iniciativa enviada por la presidenta Cristina Kirchner.
La mandataria adelantó en la jornada que en la cumbre del G20 del jueves y viernes en San Petersburgo (Rusia) planteará el tema de la deuda pública y de los fondos especulativos a sus homólogos.
"Vamos a tratar el tema de los fondos buitres (...) pese a que hubo una negativa, aparentemente, por parte de Estados Unidos a que se mencionaran específicamente en el documento final" de la cumbre de este foro económico de países desarrollados y emergentes, dijo Kirchner a su llegada San Petersburgo.
La decisión de lanzar una reapertura destinada al remanente de bonos en "default" se precipitó luego de un revés sufrido en agosto por Argentina en un juicio que llegó hasta una Corte de Apelaciones de Nueva York.
Ese tribunal hizo lugar a un recurso de grupos financieros, que Argentina llama "fondos buitre", y la sentenció a pagar el 100% en efectivo de una deuda de 1.470 millones de dólares. El fallo fue confirmado en apelación y ahora está en suspenso a consideración de la Corte Suprema de Estados Unidos, que debe decidir si toma o no el caso.
Durante el debate en el Senado argentino, el miembro informante del oficialismo, Aníbal Fernández, ratificó la voluntad del gobierno de pagar la deuda y recordó que las demandas contra el país "implican el 0,45% de la deuda defaulteada en 2001".
"El Fondo Elliot, por ejemplo, compró en 2008 400 millones de dólares de deuda en 40 millones y ahora pretende cobrar 700 millones", explicó Fernández.
En tanto, Laura Montero (de la opositora Unión Cívica Radical) justificó el apoyo señalando que su bloque "no se va a negar a darle al gobierno las herramientas que necesita, porque es el Ejecutivo el responsable de la negociación en estas instancias".
El proyecto será girado ahora a Diputados para su sanción.
Kirchner dijo en un discurso por cadena nacional el 26 de agosto que "Argentina demuestra su voluntad de pago, es un pagador serial y no un deudor recalcitrante como dijo el tribunal (en Estados Unidos)" al fallar en su contra.
Según cifras oficiales, Argentina lleva pagados USD 173.000 millones de su deuda desde que recompuso la situación a partir de 2005 tras la monumental moratoria por 81.800 millones de dólares que declaró un efímero gobierno de una semana en 2001.
Los canjes de 2005 y 2010 permitieron al país reestructurar un 93% de los bonos en "default", con una quita promedio de 67%, a cambio de entregar nuevos títulos que ofrecen altos rendimientos, atados al alza del Producto Interno Bruto (PIB).
Argentina había afirmado que no pagaría "ni un dólar" a los "fondos buitres", así llamados porque compraron a muy bajo precio la deuda ya en "default". Pero ante los reveses judiciales sufridos en Estados Unidos decidió ofrecerles un trato igualitario al que gozan el resto de los acreedores.
"Expresamos el más absoluto acuerdo en que no se debe reconocer a los fondos litigantes ningún pago que signifique una mejora respecto a las condiciones que ha obtenido el 93% de los inversores", dijo este miércoles en un comunicado la cámara Abappra, que concentra bancos privados y cooperativos.
Un eventual fallo desfavorable de la Corte estadounidense podría derivar en un embargo del dinero que Argentina paga por los bonos normalizados y una crisis de confianza en las reestructuraciones soberanas, según advierten organismos internacionales como el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Otros grupos que integran el 7% de bonistas también entablaron demandas, pero sin el éxito de NML, del financista estadounidense Paul Singer, que el año pasado puso a Kirchner en aprietos al lograr el embargo temporario de la fragata de la marina de guerra "Libertad" en un puerto de Ghana.
El Senado argentino aprobó el miércoles y giró a Diputados el proyecto de ley para la reapertura del canje de deuda para un 7% de tenedores que rechazaron anteriores reestructuraciones, entre ellos los fondos especulativos que litigan contra el país en Estados Unidos.

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