Cristina Kirchner: "El acuerdo con el FMI es un lastre"
por Daniel Merolla (AFP)
La vicepresidenta y líder peronista de centroizquierda, Cristina Kirchner, ratificó el jueves que no será candidata en las presidenciales de octubre y exhortó a revisar el acuerdo con el Fondo Monetario al que acusó de ser "inflacionario".
"No, no, presidenta no", dijo cuando más de 2.000 partidarios en un teatro de La Plata (a 60 km al sur) y una multitud que se manifestaba afuera en las plazas le pedían que vuelva a postularse.
Kirchner, de 70 años, fue presidenta dos veces entre 2007 y 2015. Pese al clamor popular, con las encuestas que la ubican como la peronista mejor perfilada, recordó que está "condenada, proscripta, inhabilitada y con un intento de ser asesinada", cuando le gatillaron en la calle una pistola que no disparó en setiembre de 2022.
Kirchner evitó pronunciarse sobre candidaturas oficialistas, luego de que el presidente peronista liberal Alberto Fernández dijo que renuncia a presentarse. Convocó, en cambio, a discutir "un programa" con los sectores peronistas.
"No voy a ser candidata a nada", había dicho en diciembre cuando recibió una condena de seis años de prisión e inhabilitación a cargos públicos por defraudación con obras viales, sentencia que rechazó por considerarla "una persecución política" contra los líderes de partidos populares en América Latina.
Al polemizar con el candidato a presidente de la ultraderecha, el economista Javier Milei, dijo que su proyecto de dolarización "ya fracasó " en la década de los años de 1990, cuando se instaló una convertibilidad que implicaba dolarizar al peso.
Dijo que aquella experiencia terminó "con represión, muertos en las calles, y pobreza".
Los partidarios cantaron toda la noche "Cristina presidenta", pero la líder dijo que "no se hagan los rulos", una frase de raíz muy argentina que significa que no especulen, que no se crean lo que no se puede hacer.
"La inflación (de 104% interanual) no para con la dolarización", dijo y mostró un cuadro según el cual la curva de la disparada de precios que acumula casi 22% en lo que va del año se inició con la firma del pacto con el FMI, tomado por el anterior gobierno derechista por 44.500 millones de dólares.
"Cuando le pagamos toda la deuda al FMI en 2005 (casi 10.000 millones de dólares), los trabajadores pasaron a tener el 51% de la renta del país", explicó. Ahora la participación de los asalariados está muy por debajo, según estadísticas oficiales.
"El acuerdo con el FMI es un lastre. Es criminal. Estamos ante un dilema brutal. Y no decimos que no tenemos que pagar, tenemos que revisarlo para quitar las condicionalidades como prohibir la intervención del Banco Central, y dictarnos políticas fiscales y monetarias", sostuvo Kirchner.
