jueves, 25 de julio de 2019


La muerte de De la Rúa y los fantasmas de una Argentina atroz

por Daniel Merolla


Un viejo maestro del periodismo enseñaba que cuando a uno le encomiendan la semblanza de una personalidad pública debe preguntar siempre: "¿A favor o en contra?" La excepción a la regla solían ser las necrológicas, todo un género en el periodismo. Escribir en contra frente al destino inapelable se parece a escupir sobre una tumba. Pero ¿cómo escribir un perfil de un genocida, por ejemplo?  ¿O cómo escribir la de un político con un formidable lado oscuro que ensombrece toda su carrera política?
Es el caso del expresidente Fernando de la Rúa (1999-2001). Su gobierno cayó en medio de la peor crisis de la historia reciente de Argentina. Falleció de madrugada a los 81 años de edad, tras una larga convalecencia por enfermedades cardíacas y renales. En medio de otra crisis de las peores vividas por Argentina, una muerte reflota fantasmas.
De la Rúa fue líder de un sector conservador de la socialdemócrata Unión Cívica Radical (UCR) y rival histórico dentro del partido del expresidente Raúl Alfonsín (1983-89), padre de la recuperación democrática después de la última dictadura.
El anuncio fue hecho al país por el presidente Mauricio Macri en un mensaje en las redes sociales, donde realizó un reconocimiento a su "trayectoria democrática". Macri encabeza este martes los actos por el Día de la Independencia de la corona española.
"Era un dirigente bienintencionado, una buena persona", dijo Macri sobre De la Rúa al iniciar su discurso en la ceremonia central en Tucumán (norte), ciudad donde congresales de la incipiente nación declararon el fin "de toda dominación extranjera" el 9 de julio de 1816. Un dirigente "bienintencionado" vendría a ser alguien que intenta hacer el bien. Sus últimas horas en el poder, en rigor, no fueron un buen ejemplo de lo que se espera de un líder democrático.
El exmandatario firmó su renuncia el 20 de diciembre de 2001, forzado por una rebelión popular con decenas de miles de personas en las calles que protestaban contra la recesión, el alza en el costo de los alimentos y el congelamiento de los depósitos de los ahorristas en los bancos por casi 70.000 millones de dólares.
Pero Macri le rindió  honras fúnebres  inclusomayores a las de un simple jefe de Estado. Mostró una evidente empatía con el malogrado exmandatario oriundo de Córdoba pero porteño por adopción.
- Salida en helicóptero -
Su nombre quedó ligado al fin de la convertibilidad, un régimen que ató el tipo de cambio en una relación de un peso igual a un dólar y que duró una década. Tuvo que marcharse en un helicóptero desde la azotea de la casa de gobierno, rodeada de manifestantes.
Para completar su período de gobierno, la Asamblea Legislativa nombró en la presidencia al peronista conservador Adolfo Rodríguez Saá, quien declaró el default de la deuda con acreedores privados por casi 100.000 millones de dólares. Una semana después tuvo que renunciar.
La Asamblea nombró entonces a otro peronista, Eduardo Duhalde, quien en medio de la crisis llamó a elecciones en 2003, año en que empezó la era de 12 años de gobiernos del matrimonio Kirchner, primero Néstor y después Cristina, peronistas de centroizquierda.
El padre de la convertibilidad había sido el economista liberal heterodoxo Domingo Cavallo, exministro de Economía del gobierno peronista de derecha de Carlos Menem (1989-99) y luego designado de nuevo en el puesto por De la Rúa cuando la crisis económica arreciaba.
- Alianza antimenemista -
De la Rúa había asumido al frente de una alianza antimenemista en 1999, pero la recesión que heredaba se agudizó, en tanto aparecían casos de corrupción como uno de sobornos a senadores para que se aprobara en el parlamento una ley de flexibilidad laboral que eliminó derechos de los trabajadores. Su historia quedó ligada a la tristemente famosa Banelco, para pagar coimas, que involucraron a uno de sus hombres de confianza, Alberto Flamarique. Un arrepentido relató los pagos de los sobornos con pelos y señales como nunca antes en la historia política.
Ahora es común relatar escabrosos detalles de presuntos corruptos, pero como parte del 'lawfare' o guerra judicial contra opositores. Primero presos, después investigados, y culpables, en suma, por "íntima convicción" como dijo el exjuez Sergio Moro al condenar a Lula da Silva, aunque ahora le caben al ministro de Jair Bolsonaro las generales de la ley. Las filtraciones de un medio norteamericano revelan sus chanchullos y fraudes judiciales para linchar al líder opositor brasileño.
En aquel entonces, las denuncias de corrupción contra De la Rúa y "sus muchachos del Congreso y de la SIDE" provocaron la renuncia del vicepresidente, Carlos "Chacho" Álvarez, dirigente de un sector peronista de centroizquierda.
 De la Rúa presentó problemas de salud desde hace años. Y ya había sido hospitalizado a principios de este año para someterse a una intervención quirúrgica por un delicado cuadro cardiovascular.
 La última vez que se presentó en público fue como invitado a la función de gala que el gobierno ofreció en el Teatro Colón, templo de la lírica, en noviembre pasado en el marco de la cumbre del G-20. Aún los argentinos recuerdan la noche en que declaró el estado de sitio, mientras sus policías metían bala sin asco a las multitudes soliviantadas por el hambre y la confiscación de los depósitos bancarios. Un final nada aburrido.





Una sirena que no suena de noche

por Daniel Merolla

(publicado en internet por AFP)

La argentina Delfina Pignatiello asumió que una nadadora de elite evita las fiestas trasnochadas y  desbordes juveniles porque lo suyo es entrenar y cuidarse. Así es su vida antes de los Panamericanos de Lima-2019.
Cuentan de ella que desde niña se entrena a las 7 de la mañana y a las 8 de la noche. Almuerza en el auto porque no tiene tiempo de volver a casa y es abanderada de su escuela. Una joven maravilla multicampeona, ahora con 19 años.
"Es verdad, me entreno temprano y tarde, estudio y no salgo. Lo más importante de este año son los Panamericanos y por eso mi cabeza esta ahí", comenta 'Delfi' Pignatiello, la gran esperanza albiceleste en las piscinas.
Nacida en la residencial San Isidro, en la periferia norte de Buenos Aires, asombró al mundillo de las piletas al ganar las medallas de oro en los 800 y 1.500 metros en el Mundial Junior de Indianápolis-2017, donde también se llevó la plata en 400 metros.
"Sentís que estás cansada, que no podés dar más. Pero sentís, entonces se puede", escribió a modo de aliento a otros deportistas en las redes sociales. También ha entendido el carácter épico de la alta competición.
- Heredera de sirenas -
La joven sigue los pasos de grandes sirenas del país, como Jeanette Campbell, ganadora de la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Berlín-1936 o Georgina Bardach, bronce en los Olímpicos de Atenas-2004.
Pignatiello es la única nadadora argentina ya clasificada para los Juegos Olímpicos de Tokio-2020. En otra de sus mejores actuaciones internacionales, se lució en el circuito francés de natación Mare Nostrum.
Fue allí, en las piscinas de Canet, donde estableció un nuevo récord sudamericano para los 800 metros libre. Ganó la presea de plata. Ya había conquistado la de oro en los 400 metros libre en Mónaco.
"Arranqué a nadar cuando era un bebé. Mi mamá es profesora de natación y siempre la seguí desde muy chiquita. Cuando tuve ganas de competir me lancé a los 12 años en el Club Municipal de San Isidro", relata su historia.
Desde sus comienzos en carrera le llovieron elogios. El australiano Bill Sweetenham, asesor de los mejores nadadores argentinos, dijo que en los Olímpicos "podría ser finalista, con estrategia y roce competitivo".
"Tiene ese potencial de final olímpica. Debe estar frecuentemente en acción", dijo el experto.
Un hombre clave en su carrera es su entrenador, Juan Carlos Martín. "Es una chica 10. Tiene objetivos muy claros y la natación es su pasión", afirma Martín.
- "Pasito a pasito" -
Entre los atributos de Pignatiello, destaca "una gran flotabilidad, muy buena técnica y ser muy disciplinada, trabajar intensamente".
"Fue la cuarta mujer en la historia de la natación mundial que bajó los 16 minutos en los 1.500 metros libres", en Indianápolis, dijo Martín. La sanisidrense marcó un tiempo de 15 minutos, 59 segundos, 51 centésimas.
Martín afirma que la natación es "para gente inteligente, porque las medallas se ganan de lunes a viernes y el sábado (día de la carrera) se pasan a buscar".
"No hay que rendirse jamás, pasito a pasito. Lo que te acerca a sus sueños, todo el esfuerzo, vale la pena", escribió la nadadora en las redes. Allí tiene a decenas de miles de seguidores. Pero nada de salir de fiesta.



Argentina en los Panamericanos: a pulmón y con menos presupuesto

por Daniel Merolla

(publicado en internet y Págtina 12 por la AFP)

Argentina, el país sede de los primeros Juegos Panamericanos en 1951, enfrenta el reto de Lima-2019 a puro pulmón, con su potencial dañado por un duro ajuste en los fondos que el Estado destina a fomentar deportes olímpicos.
El recorte presupuestario no afectará a estrellas y campeones, como la nadadora Delfina Pignatiello, las Leonas y Leones del hockey sobre sintético, el renovado basquetbol masculino, la judoca Paula Pareto, el gimnasta Federico Molinari y velistas con carreras consolidadas.
Pero a duras penas, Argentina se propone al menos mantener el séptimo lugar en el medallero como en Toronto-2015, en decadencia histórica tras ganar por única vez los Juegos en Buenos Aires-1951 con 68 preseas de oro.
Desde entonces, cayó cada año en el tablero. En Toronto, la cosecha fue de sólo 15 doradas. Hay cada vez menos becas y viajes de fogueo para los atletas.
En los últimos tres años, el presupuesto deportivo disminuyó 62% en dólares y este año el vital Centro de Alto Rendimiento recibió el 25% del total, la mitad de lo percibido en 2018, según cifras oficiales.
"Cuánto daño que se le hace al deporte con quita de presupuesto", escribió en redes sociales Claudio Morresi, exsecretario de Deportes.
Morresi deploró el plan de vender el valorado predio del Centro de Alto Rendimiento (Cenard) como negocio inmobiliario, con un incierto traslado a la zona sur de la ciudad.
Decenas de deportistas lamentaron, además, que la Secretaría con rango de Ministerio fue degradada a una Agencia de Deporte Nacional el año pasado.
- A la piscina -
La gran promesa joven del deporte argentino es Pignatiello, de 19 años. "Mi cabeza está puesta en los Panamericanos", dijo la atleta de los 400m, 800m y 1.500m. Es bicampeona mundial junior y multimedallista en los Juegos Sudamericanos de la Juventud Santiago de Chile-2017.
Atrapó preseas de plata en los Juegos Olímpicos de la Juventud Buenos Aires-2018, cuando la actividad pareció despertar. Fue un espejismo, aunque emergieron algunas figuras.
El Comité Olímpico Argentino (COA) destacó a Fausto Ruesga, del básquetbol 3x3, Matías Ríos en esgrima, Alliana Volkart en tiro deportivo y Sol Ordás, oro en remo en Buenos Aires-2018.
El abanderado será el velista Javier Conte, bronce en los Olímpicos de Sydney-2000. Las Leonas, únicas latinoamericanas dentro del club mundial del hockey, pretenden el oro que las lleve directo a los Olímpicos de Tokio-2020.
Su inesperado problema fue la renuncia de Lucina Von der Heyde, mejor jugadora junior mundial 2018. "Siento que hoy no estoy comprometida como tengo que estar", argumentó.
Darán pelea los equipos de rugby seven, voleibol y balonmano, así como los flamantes campeones mundiales del sóftbol en República Checa.
Al menos regresa al ruedo el juego de pelota, en el que Argentina siempre fue destacada, con cuatro oros en Guadalajara.
- Fútbol, dolor de cabeza -
El fútbol, deporte rey del país, es un dolor de cabeza. La selección femenina entró en crisis tras asombrar en el reciente Mundial de Francia. A la capitana, Estefanía Banini, la borró del equipo el DT Carlos Borello. La jugadora denunció discriminación. Otras futbolistas se bajaron en solidaridad.
Florencia Bonsegundo, de Valencia de España, dijo que dejó su puesto como una "decisión difícil y dolorosa" por "no compartir decisiones de este cuerpo técnico".
Al fútbol masculino no le va mejor. Varios clubes rechazaron ceder jugadores. Al plantel lo armó como pudo el DT Fernando 'Bocha' Batista.
El básquetbol masculino, lejos de la Generación Dorada de Manu Ginóbili, vive los juegos como un escalón al Mundial de China-2019. "Queremos reescribir la historia", dijo Facundo Campazzo, base del Real Madrid español.
El escenario se ilumina cuando se enfoca a la judoca Pareto, una médica considerada una de las más grandes deportistas argentinas individuales de todos los tiempos.
'La Peque' (1,50 metros de altura) fue campeona del mundo en 48 kilos, oro olímpico en Río-2016 y bronce en Pekín-2008, con 23 subidas a los podios en torneos internacionales.


martes, 9 de julio de 2019


El regreso a tierra santa

por Daniel Merolla

(publicado en internet por AFP)

Millares de hinchas de San Lorenzo de Argentina festejan en estado de éxtasis el regreso al barrio porteño de Boedo del que fueron desalojados hace 40 años, para reconstruir el estadio y bautizarlo Papa Francisco, su simpatizante más ilustre.
 Los aficionados le pusieron nombre a la cruzada: "La vuelta a tierra santa". Uno de los apodos sanlorencistas más populares es el de "Los santos de Boedo", club fundado por un sacerdote católico, el padre Lorenzo Massa, hace 111 años.
 Considerado uno de los cinco grandes del fútbol argentino, junto con Boca, River, Racing e Independiente, San Lorenzo cayó en desgracia en la década de 1980 y el predio de su estadio Gasómetro fue confiscado por la dictadura (1976-1983). Las tribunas fueron demolidas.
 "Sentimos que es una reivindicación histórica", declaró el presidente de la institución, Matías Lammens, un joven abogado que es candidato a alcalde de Buenos Aires por la oposición al presidente Mauricio Macri en las elecciones del 27 de octubre.
 El desalojo en 1980 fue bajo presión. El alcalde de la dictadura, brigadier Osvaldo Cacciatore, le preguntó al presidente del club en aquella época, Vicente Bonina: "¿Usted tiene hijos en la facultad, no? Le recomiendo que haga caso a lo que le pido". Los hijos de Bonina podían ser desaparecidos.
 - Amenaza militar -
 Y se fueron con la música a otra parte. Para colmo, en 1981 fue el primer grande en sufrir un descenso a la segunda división. Pero sus hinchas llenaron estadios como nunca. San Lorenzo es el tercer equipo local en venta de tickets en la historia detrás de River y Boca.
 El Ciclón, como le dicen, fue un vagabundo que alquilaba estadios hasta que pudo edificar uno en el Bajo Flores (al sur). Es su sede ahora y la llaman Nuevo Gasómetro.
 Los sanlorencistas jamás perdieron la ilusión de volver a su tierra prometida. El fundacional barrio de Boedo es símbolo de la porteñidad, del tango, de las murgas y comparsas del carnaval, de la intelectualidad transgresora. Aún conserva su geografía de casas bajas de clase media y trabajadora.
 "El día la reinauguración va a ser un momento de tremenda intensidad", dijo Adolfo Res, un historiador considerado el padre del regreso.
 Res fue uno de los pioneros en la recuperación del predio. Su momento de gloria fue la movilización de 110.000  hinchas en 2012 a la histórica Plaza de Mayo, tradicional de los actos políticos, para reclamar al parlamento comunal que aprobase restituir los terrenos.
 Al club no le alcanzó con la luz verde de los legisladores. Tuvo que encarar una dura negociación con un hipermercado de capitales franceses que se instaló en 1985 donde estaba el Viejo Gasómetro, llamado así por un antiguo tanque medidor de gas al lado de las tribunas de madera.
 Una colecta de hinchas reunió más de 7 millones de dólares para la recompra. San Lorenzo aún "está pagando cuotas" de miles de dólares, reveló Lammens.
 - Epopeya 'cuerva' -
 Otra epopeya, admiten los dirigentes, será levantar un estadio para 42.000 espectadores, cuyo costo estimó Lammens en 75 millones de dólares, en medio de la recesión y devaluación del peso.
 El segundo hincha más conocido del club es Marcelo Tinelli, animador de televisión y rey del rating con sus concursos de bailes. "Este es el mayor logro de la historia de San Lorenzo", dijo Tinelli. Lo comparó con los 15 títulos de primera división y una Libertadores, entre otras copas.
 El tercer hincha más famoso es el actor estadounidense Viggo Mortensen, quien lució en los últimos premios Oscar de Hollywood medias azulgranas y un escudo del club debajo de la solapa del traje de gala. "Le mando un gran saludo a los 'Cuervos'", dijo sobre otro alias de los sanlorencistas.


Oposición peronista le advierte al FMI lo que la entidad sabe mejor que nadie

por Daniel Merolla

El pase de Christine Lagarde de la dirección del FMI al banco europeo parece una prudente salida del escenario. La entidad le concedió al gobierno argentino de Mauricio Macri el mayor préstamo de la historia por 57.000 millones de dólares. Lagarde firmó el crédito stand by y desde el principio se deshizo en elogios para una administración cuyo rumbo parece encajar en los postulados ideológicos del Fondo Monetario. Es una simpatía que Macri se atrevió a calificar de romance cuando los dólares  empezaron a fluir hacia Argentina.
La tolerencia de Lagarde llegó a aceptar una reformulación del contrato con aumento del monto prestado y concesiones de todo tipo, hasta la de aceptar que el dinero se use para controlar el tipo de cambio. La venta de billetes verdes provoca fuga de capitales y dicho artilugio está claramente prohibido por el estatuto del FMI. Se presta para que se pague deuda no para alimentar la fiesta financiera de los especuladores. Pero la empatía con Macri todo lo puede. El problema es que el tiempo de la lluvia de dólares se acaba. Los técnicos del Fondo lo saben mejor que nadie.
Los desembolsos periódicos son el respirador artificial que permitió a Macri evitar una declaración de 'default' en mayo de 2018. Pero los fondos se agotan y llegará la hora de repagar la cuenta de semejante salvavidas financiero. Entre 2020 y 2021, Argentina tiene que empezar a pensar cómo resolver la salida de un laberinto parecido a una pesadilla.
Macri guarda silencio, pero los dos principales candidatos presidenciales opositores le han expresado al FMI la necesidad de reformular los términos del multimillonario préstamo otorgado al país a cambio de un severo plan de ajuste.
"Le transmití al FMI nuestra disposición a reformular los acuerdos sin exigirle más esfuerzos a nuestro pueblo. La Argentina vive hace tiempo en un 'default' encubierto", dijo en un comunicado el candidato Alberto Fernández.
Fernández es un liberal progresista del peronismo que encabeza una fórmula en compañía de la expresidenta Cristina Kirchner (peronista de centroizquierda).
La reunión fue celebrada en Buenos Aires con Alejandro Werner, director del Departamento del Hemisferio Occidental del FMI, y Trevor Alleyne, el representante residente.
En otra declaración de prensa, el FMI expresó que tuvo con Fernández "una reunión productiva" y la consideró "una oportunidad para intercambiar opiniones sobre las perspectivas económicas actuales de la Argentina y conocer más sobre sus prioridades de política económica".
Los hombres del FMI se reunieron también con otro aspirante peronista, el liberal centrista Roberto Lavagna, quien dijo en las redes sociales que su eventual gobierno "renegociará los plazos del 'stand by' porque, así como están, ahogan por muchos años la esperanza de crecimiento de los argentinos ¡Ellos y el gobierno lo saben!".
Fernández afirmó que Macri "no cumplió con el propósito de reducir la deuda y la inflación, recuperar el crecimiento, generar empleo y combatir la pobreza".
- Recesión, pobreza, desempleo -
Argentina está recibiendo del FMI la mayor ayuda financiera de la historia en un plan a tres años, Macri buscará su reelección en la votación del 27 de octubre. Los sondeos marcan que su mayor adversario es Fernández, en un escenario polarizado, en tanto que el tercero en discordia es Lavagna.
 La votación para un mandato de cuatro años se realizará en medio de una dura crisis económica expresada en forma de una recesión que ya dura un año, con una estela de pobreza, desempleo e inflación. 
 En cambio, crítico de las políticas proteccionistas, de controles y subsidios que caracterizaron al gobierno precedente de Kirchner (2007-2015), Macri pide "no volver al pasado" porque considera que sería equivalente a una autodestrucción.
 Camilla Andersen, jefe de la División de Comunicación de Políticas del FMI, dijo en rueda de prensa que las reuniones de Werner y Alleyne con Fernández y Lavagna se dan en el marco de la política del FMI de involucrarse "proactivamente" con los actores políticos de todos los países, en particular con los que tiene programas en curso. 
Antes de salir de escena, Lagarde apoyó las reformas fiscales emprendidas por el gobierno de Argentina durante una reunión con Macri al margen de la cumbre del G20 que se celebra en Osaka, Japón. 
"Reiteré el apoyo del Fondo al programa de estabilización económica de Argentina y los continuos esfuerzos de políticas para abordar las vulnerabilidades económicas, incluida la reducción de los desequilibrios fiscal y de cuenta corriente del país, y el combate decisivo de la inflación", informó en un comunicado Lagarde. Un tiempo después, dejó el puesto.
Se sabe que detrás de las decisiones de Lagarde estuvo la luz verde del gobierno estadounidense de Donald Trump, que cuidó a uno de sus socios latinoamericanos favoritos. El dilema es que la renegociación será dolorosa y será el momento de dar explicaciones.


De niña prodigio a prodigiosa concertista de piano

por Daniel Merolla

La última visita al país de Martha Argerich para un recital en el Centro Cultural Kirchner (CCK) hizo voltear una vez más la mirada hacia otra artista argentina que construyó una carrera memorable fuera del territorio y desde que era una púber. De niña prodigio a prodigiosa concertista de piano, es una celebridad lejos de casa. No podía ser de otra manera para quien ha sido una transhumante, una nómade de la música en perpetuo movimiento.
Apenas tenía 4 años cuando su asombrosa trayectoria escribió un primer capítulo en un jardín de infantes de Buenos Aires. Un compañerito que la hostigaba le dijo un día que no era capaz de tocar el piano como él. La pequeña Argerich se lanzó hacia el piano y lo dejó boquiabierto cuando se sentó frente al teclado e interpretó una canción que cantaba la maestra.
La anécdota la pinta de cuerpito entero. Por carácter y por talento. El niño creía que Argerich era demasiado chiquita para el instrumento. Su desafiada llegó a ser una de las más grandes concertistas desde la segunda posguerra mundial del siglo XX.
La pianista lo recordaba con simpatía: "Él era mayor que yo. Me molestaba diciéndome lo que él podía hacer y yo no. Toqué sólo con un dedo. La maestra llamó a mis padres. Me compraron el instrumento y me llevaron a estudiar".
Poco después, la niña prodigio tocaba en público por primera vez. Y a los 7 años ofreció su primer recital, en el teatro Astral de Buenos Aires, con obras para piano y orquesta de Mozart.
- Un guiño de Perón -
Había nacido en Buenos Aires, el 5 de junio de 1941. Su padre descendía de una familia de catalanes y su madre de judíos ucranianos que huyeron de los pogromos.
Tras haber tocado a los 12 años en el Teatro Colón, templo de la lírica en Argentina, ocurrió una anécdota que disparó su carrera internacional.
Su madre consiguió una entrevista con el entonces presidente Juan Perón. Ni la familia ni ella eran peronistas. Al contrario, simpatizaba con la oposición.
Pero aquella audiencia con el Presidente era una oportunidad. La historia la contó ella: "Perón me preguntó '¿adónde querés ir, ñatita (pequeña)?'". "Yo quería ir a Viena, para estudiar con Friedrich Gulda. A él le gustó que no quisiera ir a Estados Unidos", relataba Argerich.
"Lo más cómico fue que mi mamá, para congraciarse, le dijo que a mí me encantaría tocar un concierto en la peronista Unión de Estudiantes Secundarios. Y parece que yo debo haber puesto una cara bastante reveladora de que la idea no me gustaba. Perón le empezó a seguirle la corriente a mamá, diciéndole que lo iba a organizar", prosiguió.
La artista contó que Perón le guiñaba un ojo y "por debajo de la mesa me hacía con un dedo que no. Él la estaba cargando (bromeando) a mamá y a mí me tranquilizaba. Se dio cuenta de que yo no quería. Fantástico, ¿no?", recordó.
Perón creó para los padres de Argerich dos cargos ad hoc en la embajada en Austria y la jovencita pudo estudiar con Guida. También se perfeccionó con Madeleine Lipatti y Nikita Magaloff, entre otros.
- Extraño temperamento -
La revista francesa especializada Diapason dijo una vez que para encontrar una pianista tan eximia había que remontarse a la alemana Clara Schumann, una de las virtuosas del siglo XIX.
La otra nota dominante en la vida de Argerich fue su personalidad excéntrica. "No me siento establecida. Hasta que nos morimos estamos siempre construyéndonos", filosofaba.
"No estoy muy a gusto con mi profesionalismo. Esta es una profesión bastante anacrónica. Esta vida impide estar donde uno querría y con quien uno querría. Me hubiera gustado ser médica", confesaba.
Le gustaba la literatura del checo Milan Kundera y tenía un tenor jazzístico en ciertas interpretaciones: "A mí me divierte bastante eso. Sacar ciertas cosas. Tengo un temperamento muy extraño".
Durante décadas desistió de dar conciertos como solista. "Hace ya mucho tomé la decisión de no tocar sola. Es un poco misterioso. Yo no sé bien por qué. No me gusta la soledad en el escenario", explicaba.
Se casó tres veces y siempre con músicos. Tuvo tres hijas, la violista Lyda Chen, Annie Dutoit y la cineasta Stéphanie Kovacevich. Espectáculos de antología ha dado en compañía del célebre pianista y director argentino Daniel Barenboim, creador de la Orquesta palestino-israelí West–Eastern Divan.
Del expresidente estadounidense Barack Obama recibió el Premio Kennedy y ganó tres veces el Grammy, entre decenas de galardones internacionales. Nadie más la retó a mostrar cualidades en el piano.


God bless you, Norma

por Daniel Merolla

El cine argentino entró una noche en la historia grande del cine con los Premios Óscar de la Academia de Hollywood. Norma Aleandro, una mujer considerada la gran dama del arte dramático argentino, sólo atinó a intercalar un emotivo "God bless you" (Dios te bendiga) cuando dijo, tras abrir el sobre: "And the winner is... The Offcial History" (La Historia Oficial, 1985) de su compatriota, el director y productor Luis Puenzo. 
Los argentinos la vieron por televisión. Había rumores de que podía ganar. Y fue el primer filme argentino laureado con un Óscar y ella su protagonista. Apenas podía contener el llanto de alegría.

Actriz de carácter y nacida en una familia de artistas,
Lectora empedernida de niña, autodidacta, despreciada por una maestra teatral, triunfadora después, idolatrada por el público, directora ilustre, pero víctima de un exilio, en una sociedad implacable con los transgresores, por sus ideas progresistas. Se había atrevido a acompañar las denuncias por los desaparecidos en la dictadura.
Aquel momento histórico de gloriosa emoción, tal vez el más recordado en su carrera, fue en 1986, en la entrega de la estatuilla que bautizó una bibliotecaria de la Academia, Margaret Herick, por su parecido con su tío Óscar. Aleandro, dominada por los nervios, tardó en abrir el sobre para anunciar el premio a la mejor producción en lengua no inglesa.

Se abrazó primero al legendario zar del cine estadounidense Jack Valenti y luego a un atildado Puenzo, en su hora de fama mundial.
- El terror -
Aleandro interpretaba a una profesora de historia que se entera que su hija adoptiva de 5 años había sido apropiada a un matrimonio de desaparecidos en la dictadura de la década de 1970. Su abuela, de la Plaza de Mayo, la buscaba removiendo cielo y tierra.
El personaje de Aleandro toma partido por la familia de sangre y se enfrenta con su marido, cómplice de los represores, papel que jugaba en la película otro prócer argentino de la actuación, Héctor Alterio.
"Antes del rodaje yo trabajaba en teatro. Venía Luis (Puenzo) con el guión y yo lloraba. Sentía miedo. Pero estoy feliz de haberla hecho", contó una vez. Había vuelto la democracia en 1985 pero aún actuaban los grupos del terror y se recibían amenazas de muerte por filmar una historia de robo de bebés.
 Aleandro conocía lo que era tener miedo en la dictadura. Agentes del régimen le arrojaron gas lacrimógeno en un teatro de Buenos Aires y una bomba estalló luego en su casa. La amenazaron de muerte por teléfono. Tuvo que exiliarse con su marido y su hijo en España.
 No se dio por vencida. "En los momentos descalabrantes, cuando hay demasiada desilusión, tristezas y falta de esperanza, no hay que perder conciencia y vivir la vida sin tanto dramatismo", recordaba al regresar.
 Entre sus decenas de lauros nacionales e internacionales, figura el de Mejor Actriz del Festival de Cannes de 1986 por aquel papel en La Historia Oficial.
 - ¿Tirarse al río? -
 La premiaron o nominaron por papeles en Gaby: A True Story (1987, de Luis Mandoki), Sol de Otoño (1996, de Eduardo Mignona) y El Hijo de la Novia (2001, de Juan José Campanella), entre otros.
 Hija de un matrimonio de populares actores, Pedro Aleandro y María Luisa Robledo, a los 13 años estudiaba en el Instituto de Arte Moderno. La habían echado de una escuela media muy autoritaria por defender de la discriminación a unas compañeras judías.
 Llegó al país Simone Garmá, una destacada profesora teatral. "Yo quería ser como ella. Era alguien muy elegante", rememoraba. Pero Garmá le dijo: "Usted no sirve".
 Aleandro era muy religiosa. Se fue a rezar y llorar a una iglesia. Luego llegó a la orilla del río de la Plata decidida a arrojarse a las aguas. No se animó. Le llevó años superar el trauma.
 "Fui lectora y autodidacta. Lo aprendí de mi abuela española Pepita que nos leía El Quijote junto con mi hermana (la fallecida actriz María Vaner). Nos crió cuando mis padres estuvieron en viajes laborales", evocaba.
 En teatro hizo obras de Eurípides, Molière, Lope de Vega, Cervantes, Tirso de Molina, Tennessee Williams y Arthur Miller. El cine y la televisión la convirtieron en una figura popular y en la dama de oro de la actuación.