lunes, 14 de febrero de 2022

 

Del Potro: por amor al tenis

 /  Buenos Aires (Argentina)  -  11 febrero 2022 15:14  -  AFP (Daniel MEROLLA)  /  SEMBLANZA  -  9ZN4GU

Juan Martín del Potro hizo historia en el tenis argentino al ganar la Copa Davis, el US Open y dos preseas olímpicas pero en la hora del retiro queda el recuerdo de que supo enfrentar a los grandes de su época y a una pesadilla de lesiones.

Conocido en el  mundo como 'La Torre de Tandil', por sus casi dos metros de altura y la natal ciudad sureña, su coraje y talento sucumbieron al final ante un rival invencible: una rodilla derecha malherida que no lo dejaba ni dormir.

Seguidor fiel del popular Boca Juniors, amante de los animales, católico admirador del papa Francisco, pescador empedernido, y fan del roquero Bruce 'The Boss' Springsteen, tuvo entre sus hinchas y amigos al  idolatrado Diego Maradona.

"Lo di todo", dijo en medio de un llanto desconsolado, la noche en que volvió a jugar un partido del circuito después de 32 meses inactivo por la rebelde dolencia.

Cayó ante su amigo y compatriota Federico Delbonis 6-1 y 6-3 el martes 8 de febrero. Entre los dos habían anotado los tres puntos para vencer a Croacia en 2016 y ganar por primera y única vez la Davis para los albicelestes.

"Posiblemente no nos reencontremos más", dijo entre lágrimas mientras unos 5.000 hinchas suyos lo ovacionaban y le cantaban "¡Delpo no se va!" en el histórico court central Guillermo Vilas del Lawn Tennis Club, El lugar que eligió para una despedida, en primera ronda del ATP 250 de Argentina.

El nombre de Vilas era todo un símbolo para aquel momento. 'Willy' es el mejor tenista argentino de la historia, con 62 campeonatos profesionales y cuatro Grand Slams, delante de José Luis Clerc, con 25 y Del Potro, con 22. Un lugar de privilegio para el tandilense que llegó a ser número tres del ranking.

Delpo se negaba a decir: "Me retiro". Dejaba prendida una lucecita de esperanza. Una ilusión en la que nadie creía al ver que no podía correr a la red ni para devolver un drop. Después llegó el anuncio de que no asistiría al ATP 500 de rio de Janeiro.

Con voluntad de hierro había superado ocho entradas a los quirófanos. Cuatro veces por las muñecas y cuatro por las rodillas.

"La salud me lleva a tener que tomar una decisión. Hoy deseo poder dormir sin dolor", confesó antes de abrazarse esa noche con su madre Patricia, quien por primera vez lo veía jugar en los courts.

Sentada en una butaca del estadio, muy seria, con el ceño fruncido y triste, también lo veía la mejor tenista argentina de la historia, Gabriela Sabatini, ex top ten, una de las personalidades más queridas y recordadas del circuito.

"Disfrutamos mucho de verte jugar. Nos hiciste vibrar tantas veces. Gracias por lo que le diste a este deporte. Hoy tenés una vida por delante", dijo Sabatini.

- El largo adiós -

Era un largo adiós el de Del Potro. Otro gigante del deporte argentino, el basquetbolista Emanuel Ginóbili, oro olímpico en los Juegos de Atenas-2004 y con cuatro anillos en la NBA, expresó: "Tus lágrimas son las de todos los que amamos y estamos cerca del deporte".

El mundo del tenis le tributaba la despedida desde los cuatro confines, aunque Delpo se negaba a decir 'Chau'. Sin pàlabras, lo hizo al colgar su vincha blanca en la red del Lawn Tennis tras perder con Delbonis.

No era con un broche de oro la despedida de hecho, pero entre los miles en la cancha y miles por TV no había olvidos. Se iba el hombre al que le tocó una parada durísima: jugar en los tiempos del Big-3, el que forman Rafael Nadal, Novak Djokovic y Roger Federer, tres colosos admirables.

Dueño de una potente derecha, a los tres les pudo ganar. Y a Federer lo derrotó en el US Open-2009. Fue en cinco sets en el cemento de Nueva York. Tenía 20 años.

Su paso por los Juegos Olímpicos también fue destacado. Le ganó el bronce a Djokovic en Londres-2012 y la plata fue Río-2016 tras perder con Andy Murray. En el camino había dejado a Djokovic y a Nadal, La "Torre" supo hacer historia.



jueves, 10 de febrero de 2022

 La dictadura se cavó su propia fosa en la Guerra de Malvinas

por Daniel Merolla


El mesiánico dictador argentino Leopoldo Galtieri se cavó su propia fosa hace 40 años cuando lanzó la aventura militarista de Malvinas y perdió la guerra contra Gran Bretaña, derrota que derivó en la caída del régimen y el retorno a la democracia.

El 2 de abril de 1982, tropas despachadas por Buenos Aires recuperaron por la fuerza las islas que Argentina reivindica como parte de su territorio y tras 74 días de batallas en tierra, mar y aire se rindieron ante una colosal fuerza de tareas enviada por Londres.

"Galtieri tenía pretensiones políticas de pasar a la historia. Su feroz dictadura entraba en fuerte crisis económica, en medio de violaciones masivas a los derechos humanos. Fue puro oportunismo sin rasgos de patriotismo", dijo a la AFP el historiador Felipe Pigna, prolífico autor de libros y programas didácticos de TV.

Dos días antes, una masiva movilización callejera de la central obrera, con apoyo de partidos políticos y reprimida con centenares de heridos y detenidos, empezaba a darle un golpe de gracia a la tiranía.

"Fue un manotazo de ahogado de la dictadura cívico-militar que buscaba perpetuarse en el poder. Malvinas es parte de la identidad y pertenencia de los argentinos", afirmó a la AFP Edgardo Esteban, director del Museo Malvinas, escritor y periodista, multipremiado en festivales de cine por el guión de la película 'Iluminados por el fuego", su testimonio como excombatiente en las islas.

Los combates arrojaron un saldo de 649 argentinos y 255 británicos muertos. El mundo asistió con asombro a un enfrentamiento bélico entre países de Occidente.

 

- Fantasía dictatorial -

 

La disputa de soberanía había sido reconocida por Naciones Unidas en 1965. Se invitó a negociarla, pero el Reino Unido siempre se negó. "La causa Malvinas es parte de la identidad y pertenencia de los argentinos desde la usurpación por tropas británicas en 1833", dijo Esteban.

Malvinas tenía un gobernador y población argentinos. Era una herencia de España luego de declarar la independencia de la corona en 1816.

"La dictadura creó la fantasía del apoyo que tendría de Estados Unidos. El plan era ocupar, negociar y retirarse. Pero al ver la Plaza de Mayo llena desde el balcón de la casa de gobierno, Galtieri decide quedarse", evocó Pigna.

Casi 15.000 soldados argentinos fueron movilizados al archipiélago en el Atlántico Sur. La primera ministra británica Margaret Thatcher venía debilitada internamente pero encuentra un motivo para mejorar su imagen y unir al reino. Manda a luchar a miles de tropas, dos portaviones y centenares de barcos, bombarderos y helicópteros.

Pigna planteó las contradicciones de Galtieri: "No toma represalias o medidas de presión, como hubiese sido bloquear las cuentas de británicos en el país. En tanto, Londres consigue el apoyo de la OTAN (Tratado del Atlántico Norte), de Washington y de la dictadura de Augusto Pinochet en Chile".

"Hubo una enorme superioridad militar y tecnológica de la task force, pese a que perdió grandes barcos de su flota", ilustró el historiador.

 

- Colonia siglo XXI -

 

"¿Por qué al Reino Unido le interesaba e interesa Malvinas? Porque le permite dominar los mares del sur. Depreda la pesca en aguas argentinas con ganancias acumuladas de 180.000 millones de dólares, más el petróleo off shore, con una gran base militar virreynal que mira a la Antártida, la mayor reserva de agua potable del planeta", explicó Esteban.

Argentina intenta en vano llevar a Gran Bretaña a una mesa de negociaciones, única esperanza de recuperar la soberanía. La respuesta de Londres fue convocar en 2013 a un referéndum que aprobó la pertenencia al reino con casi un 100% de votos de los 2.000 habitantes.

"Hay un absurdo en el mantenimiento en el siglo XXI de un enclave colonial y de una fortaleza militar", evaluó Pigna.

El historiador y el excombatiente coincidieron en separar la actitud heroica de los soldados ("esos chicos que pusieron el cuerpo", dijo Pigna) de las erráticas conducciones militares, que incluso les aplicaron torturas.

Los tormentos los habían perfeccionado en millares de desaparecidos, arrojados vivos al mar, exiliados y perseguidos entre 1976 y 1983, año en que regresó la democracia.

miércoles, 9 de febrero de 2022

El largo adiós al tenis de Del Potro

por Daniel Merolla


(AFP)

 El largo adiós al tenis de Juan Martín Del Potro, consumado de hecho tras perder con su compatriota Federico Delbonis en primera ronda del ATP 250 de Buenos Aires, cosecha emotivos tributos de los aficionados y de grandes figuras del deporte.

"¡Del Potro no se va!", le cantaban 5.000 de sus hinchas mientras agitaban banderas argentinas y pancartas cerca de la medianoche del martes en un Lawn Tennis Club colmado. El tablero marcaba un resultado frío, sin piedad: 6-1 y 6-3.

Al final, lo hicieron llorar al ex número tres del mundo que de por si tiene lágrima fácil. Hacía una semana que se estaba despidiendo de la gente y de los courts, por su lesión en la rodilla derecha que lo tuvo alejado 32 meses de las canchas.

"Tus lágrimas son las de todos los que amamos y estamos cerca del deporte", escribió en redes sociales 'Manu' Ginóbili, medalla de oro olímpica en Atenas-2004 y cuatro anillos ganados en la NBA.

Del Potro, de 33 años, acosado por los dolores incluso al dormir, no se quería ir, para darle la razón a los aficionados. En ningún momento anunció el retiro con todas las letras. Pero cuando terminó el partido se sacó su vincha blanca y la colgó de la red. Fue todo un símbolo.

Sentada en las graderías del Lawn Tennis, Gabriela Sabatini, la mejor tenista de la historia argentina, miraba el partido con un gesto serio. No había sentimiento de festejo.

"Disfrutamos mucho de verte jugar. Nos hiciste vibrar tantas veces. Gracias por lo que le diste a este deporte. Hoy tenés una vida por delante", escribió en las redes sociales Sabatini. 

La 'Torre de Tandil' (su lugar de nacimiento, en el sur de la provincia de Buenos Aires) tiene aún algún compromiso comercial. Y dijo que iba a consultar a los médicos otra vez. Pero el punto final fue dado. Lo consideró un "broche de oro" porque, a su juicio, "fue en la cancha y no en una conferencia de prensa".

"Lo dí todo", contra Delbonis, dijo desde el micrófono de la televisión. Pero a pesar de la resistencia heroica que opuso en el segundo set, no corría a la red a devolver un drop y tampoco hacia los costados.

Eso sí, que su amigo Delbonis no le diera espacio para que metiera uno de esos tremendos derechazos de drive. Lo cierto es que carece de la solidez física para afrontar el circuito. El talento solo no alcanza.

"Hoy es un punto y aparte. El tenis queda a un costado hasta que pueda mejorar mi pierna. Ahora no tengo claro lo de Rio (jugar o no el ATP 500 en Rio de Janeiro a partir del 14 de febrero)", admitió en la rueda de prensa.

Nadie piensa seriamente que Del Potro pueda jugar con normalidad en Rio. La verdad cruda estaba en lo que dijo en el mítico polvo de ladrillo del court central 'Guillermo Vilas': "Posiblemente no nos reencontremos más".

"La salud me lleva a tener que tomar una decisión. No tengo las fuerzas que creen. Hoy deseo poder dormir sin dolor", reconoció.

Los días de gloria de Del potro fueron al ganar el US Open de 2009 al entonces número uno del mundo, el suizo Roger Federer, la Copa Davis-2016 ante Croacia y dos medallas olímpicas, la de plata en los Juegos de Rio de Janeiro-2016 y la de bronce en Londres-2012.

El paréntesis no solo fueron los casi 1.000 dáis fuera del circuito. Había sufrido antes duros parates por ocho operaciones. Cuatro veces entró a los quirófanos por lesiones en las muñecas y cuatro por las rodillas.

Al final quedan los éxitos y se olvidan las amarguras: En su trayectoria, sumó 439 victorias y conquistó 22 campeonatos profesionales como singlista.



miércoles, 2 de febrero de 2022

 

A la Argentina no la frenan aunque falte Messi

 /  Buenos Aires (Argentina)  -  02 febrero 2022 13:12  -  AFP (Daniel MEROLLA)  /  ENFOQUE  -  9XU7ML

A la Argentina, invicta en 29 partidos, no la frenan ni aunque le falte el goleador y capitán Lionel Messi, con un diseño de juego a prueba de balas, reafirmado en el triunfo 1-0 ante Colombia con la proa puesta en Catar-2022.

Desmantelada de titulares para el antepenúltimo partido de las eliminatorias sudamericanas, el martes en el estadio Mario Kempes de Córdoba (centro), la clasificada Albiceleste mantuvo altos rendimientos individuales y colectivos.

"Lo más importante es que hemos conseguido que la gente esté eufórica, identificada con la selección. Es clave que un país se sienta reflejado en su equipo", dijo el DT Lionel Scaloni. Sus hombres tocan, rotan, se adueñan del balón y de pronto meten en ofensiva el cambio de velocidad.

Hace muchos años que no se vivía tal sentimiento de empatía en Argentina. Que nadie le pida a la Albiceleste de Scaloni que brille ni deslumbre con lujos y fantasías, salvo cuando lo tiene a Messi e incluso en las ráfagas iluminadas del recuperado Ángel Di María.

"Seguimos con esta racha. Lo hacemos paso a paso, y con alegría para la gente y para nosotros", dijo el 'Fideo', de nuevo figura y ovacionado por casi 50.000 hinchas. Es la revancha de un jugador que atravesó el desierto del desprecio de la tribuna en los años de desilusiones en Mundiales y Copas América.

Lo que demuestra cada día la escuadra es autoridad, unión grupal y una idea táctica ensayada. Pero el gran reto que enfrentan Scaloni, Messi y compañía es armar un equipo competitivo a nivel global. Una Copa del Mundo son palabras mayores.

"Nuestra clave es que se ha formado un grupo humano increíble. Es un equipo. Y eso se ve reflejado en el campo", razonó Lautaro Martínez.

El 'Torito' fue el autor del gol ante los cafeteros y aparece como una pieza inamovible del esquema. Es el goleador de la era Scaloni con 19 tantos, cuatro más que Messi, quien es el artillero histórico de la Albiceleste con 80 festejos.

Una prueba de fuego para el campeón de la Copa América-2021, que en Brasil dejó atrás 28 años de amarguras sin títulos, será la 'finalísima' intercontinental del 1 de junio en Londres. Enfrentará a Italia, campeón de la Eurocopa.

Por ahora no hay otros amistosos de fuste a la vista. Como escolta del líder Brasil, jugará los dos últimos encuentros de la serie sudamericana, uno de local ante Venezuela y otro de visitante con Ecuador, a finales de marzo.

Lo que parecía una utopía era tener tantos jugadores disponibles para formar el plantel mundialista. Hay por lo menos dos candidatos fuertes para cada puesto y hasta el más pintado se puede quedar afuera.

"Falta mucho. Nadie tiene el puesto asegurado. Sólo uno lo tiene y todo el mundo sabe quién es", dijo Scaloni, quien no necesitó nombrar al siete veces elegido mejor del mundo.

Un solo ejemplo basta para ilustrar los hallazgos de Scaloni: el de Emiliano 'Dibu' Martínez. Es un arquero con una mística y mentalidad ganadoras que no se veían desde la época del campeón mundial en Argentina-1978 Ubaldo Fillol.

"Vengo a poner el cuerpo por mi país", dijo Martínez.  Así puso todo el cuerpo en un aislado remate a quemarropa de Miguel Borja en Córdoba. Un arquero de Argentina debe estar preparado para salvar súbitamente el gol mientras pasa largos minutos de espectador por el protagonismo con la pelota del equipo. El invicto también se defiende en la retaguardia.


martes, 1 de febrero de 2022

 

Argentina aprende a ganar y ser eficaz sin Messi

 /  Buenos Aires (Argentina)  -  28 enero 2022 14:24  -  AFP (Daniel MEROLLA)  /  ENFOQUE  -  9XD6P2

La clasificada selección de Argentina pasó la prueba de fuego de mantener la fortaleza del grupo y un fútbol eficaz sin su gran bastonero, Lionel Messi, al batir a Chile 2-1 en el desierto de Calama, un hueso duro de roer en ruta a Catar-2022.

La Albiceleste vivió la odisea en el Norte de Chile como si fuera un clásico y como si no tuviera el pasaje mundialista asegurado. Se lució sólo por destellos y atravesó zozobras, pero mostró convicción en el estilo de juego y un espartano espíritu de lucha.

"Seguimos sumando y creciendo como grupo", dijo Ángel Di María, genio y figura de la escuadra. Fue capitán en lugar de Messi y autor del primer gol con uno de esos zurdazos en comba de media distancia que llevan su sello. El segundo lo clavó el rebotero y oportunista del área Lautaro Martínez.

Es raro y diferente lo que sucede con Argentina. Muestra una mística y un espíritu de conjunto que no se veían desde las dos mayores epopeyas históricas: la conquista de los Mundiales de Argentina-1978 y México-1986.

¿Está el DT Lionel Scaloni a la altura de sus exitosos antecesores de aquellos tiempos, César Menotti y Carlos Bilardo? En teoría, no. ¿Y los jugadores? Salvo Messi, todavía deben demostrarlo.

"Seguimos más únidos que nunca", sentenció el zaguero Nicolás Otamendi, uno de los pocos "sobrevivientes" del desastre del Mundial de Rusia-2018, el fondo del pozo para la Selección en los 28 años sufridos sin ganar ni una Copa América hasta la conquista de Brasil-2021.

Scaloni ni siquiera pudo estar en Atacama por un contagio de covid-19. Tampoco su estratégico ayudante Pablo Aymar. Pero hasta en el banco están ensamblados los ideales, con Walter Samuel, aquel 'Muro' del Inter, como DT muletto.

La Albiceleste ha logrado que ningún jugador se encuentre con la pelota sin varias opciones de pase. Que nadie baje los brazos, ni deje de presionar al rival en todo el campo. Que todo el mundo se calce el overol del sacrificio, que no haya divismos.

Con el supergoleador Messi en París y recién recuperado de covid, Argentina encontró incluso liderazgos alternativos en Rodrigo de Paul, dentro y fuera de la cancha.

"Alguno podría pensar que este grupo está relajado por haber conseguido la clasificación. Cuando nos ponemos la camiseta de la Selección damos el 110 por ciento. Estoy feliz de ver cómo este equipo reacciona ante las adversidades", afirmó De Paul.

Lo dijo después de relatar que en Calama los demoraron en el aeropuerto, sin permiso para ir al baño, sin aire acondicionado en el hotel, con sirenas sonando al abrir las ventanas y sin agua a la mañana.

"Conmueven la entrega y el carácter del equipo. El grupo demostró que se pudo adaptar sin su capitán", dijo Samuel, sin olvidar las numerosas bajas por contagios de covid, lesiones y dolencias.

Ni hablar del panorama desolador de nuevas bajas que se le abrió a Scaloni para el partido de la fecha 16 el martes ante Colombia en el 'Mario Kempes' de Córdoba (centro de Argentina).

En el fragor de la batalla del desierto de Calama, Argentina perdió por amarillas a De Paul, a Otamendi, al lateral Nicolás Tagliafico y al volante central Leandro Paredes.

¿Será la hora del postergado Paulo Dybala? Argentina por ahora sigue invicta en 28 partidos y es escolta de la clasificada Brasil. Colombia se juega puntos de oro en su afán por el boleto. Otra vez sin Messi, a la Albiceleste sólo le queda volver a estrechar filas.

dm